Se ha desarrollado una familia de tensioactivos biocompatibles derivados del aminoácido histidina. Estos tensioactivos no son tóxicos y tiene actividad antimicrobiana. Tienen interés para la industria alimentaria, cosmética, farmacéutica y biotecnológica.
Cristal líquido hexagonal del tensioactivo.Los tensioactivos son uno de los productos químicos más versátiles, utilizados en numerosas aplicaciones industriales. Se usan como emulsionantes, humectantes, detergentes o solubilizantes. Dado que los tensioactivos pueden tener efectos negativos sobre el medio ambiente acuático, existe una demanda creciente de una alternativa más respetuosa con el medio ambiente y que provenga de fuentes renovables.
En el Instituto de Química Avanzada de Cataluña del CSIC han desarrollado una familia de tensioactivos catiónicos biocompatibles derivados de histidina, un aminoácido esencial para los animales y que está presente de forma natural en bacterias, hongos y plantas.
Los tensioactivos basados en histidina tienen propiedades superficiales mejoradas, lo que implica que su capacidad de agregación es elevada y por tanto no se requiere de gran cantidad para conseguir una buena emulsión.
Aunque el coste de producción es algo más elevado que los convencionales, al ser eficaces en pequeñas cantidades, son adecuados como alternativa a los tensioactivos convencionales en productos de mayor valor añadido, como formulaciones cosméticas y farmacéuticas. Tienen, además, una buena actividad antimicrobiana y antifúngica, por lo que podrían ser usados en alimentación, como emulsionante y para preservación de alimentos.
Los tensioactivos derivados de aminoácidos son compuestos que han despertado un elevado interés debido a su origen “natural”, multifuncionalidad e inocuidad.
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